domingo, 26 de enero de 2014

Segundos...

Nuevamente yo  por aquí... Y aún es enero.
Bueno esto se debe a que me di cuenta que está  muy abandonado... ¡Que bah! Realmente estaba haciendo mi tarea y no encuentro mi difumino así que la estoy evitando, tendré que comprar otro. Soy demasiado despistada, lo sé.
Esta vez les traigo un pequeño drabble (?) lo que sea. Es  muy corto. Es como un momento de vida. Si, experiencia propia quizás. Que más da (: Espero igual lo disfruten. Los personajes como siempre pueden imaginárselos como deseen. Son ambiguos, palabras de Dracielle (:  

Segundos. 

Juega con sus cabellos, una sensación de felicidad y nerviosismo le recorre el cuerpo al sentir su mano sobre su nuca. Sus mejillas están rojas, pero no las siente así. De pronto aquellos brazos le sorprenden y le abrazan. Tarda segundos en asimilar aquello y siente su corazón explotar mientras sus piernas quieren fallarle pero aun así corresponde al abrazo que se deshace un corto tiempo después.

-Te debo aún más. –Le susurra en su oído. 

Si antes creía que estaba soñando ahora necesitaba que le pellizcasen para que supiera que todo era verdad.

Se miran a los ojos mientras las sonrisas se apoderan de sus rostros. Él llevaba prisa pero aun así se detuvo unos segundos solo para saludarle. Sentía el palpitar del corazón incluso en su cabeza, no creía realmente que se detendría para dirigirse hacia donde estaba, incluso creyó que solo le saludaría con un movimiento rápido de mano y continuaría su camino pero, en cambio, habló unos segundos e incluso le abrazó. 

No sabía si era su día de suerte, pero solo eso bastó para ser feliz el resto del día. Le observó retirarse de una manera rápida aunque en sus ojos se leía que quería permanecer unos minutos más a su lado. Sus caritas de pucheros eran tan tiernas que quería mantenerlas en una foto pero solo se limitó a contestarle con otra. Y así en menos del tiempo que lo haría cualquier persona, o al menos así lo vio, desapareció entre los demás dirigiéndose al fin a su destino principal. 

Volteó a sus acompañantes que le miraban con unas sonrisas burlonas, solo se dedicó a cambiar el tema. Quería disfrutarlo si, pero quería ser egoísta tan solo unos momentos. Quería guardárselo para sí, por dentro era una mezcla de emociones que no sabía expresarlas y mucho menos quería compartirlas.

La sensación seguía allí y seguiría por un largo rato, incluso con solo esos cortos minutos que le tuvo enfrente bastaron para que estuviera en un mar de emociones positivas el resto del día. Dándose cuenta de aquella manera que estaba realmente hasta el fondo, hasta el cuello. Su vida sentimental estaba realmente jodida… Se había enamorado.  


viernes, 17 de enero de 2014

Etapas...

...Y luego de meses decido dejar una de mis cosas. 
Feliz año nuevo (?) si, el tiempo se ha ido volando.
Las buenas noticias que hace meses debí traer las doy hoy. Estoy en mi segundo semestre de arquitectura, quedé en la escuela al primer intento. Después de todo al parecer no me equivoqué en mi decisión. A pesar de que he batallado en algunas cosas definitivamente no me arrepiento de ello.
Bueno como he dicho anteriormente, este blog es una especie de diario. Una buena forma para salir de todo. Pues bien,  he decidido subir este pequeño relato que ha salido de uno de mis sueños. 
Este sueño lo he sentido especial en cierta forma porque no solo lo puedo tomar como algo insignificante ya que no lo es, en el momento en que abrí los ojos me di cuenta de ello.
Espero que les guste, porque yo disfruté relatándolo. Rememorando cada parte de mi sueño y volviendo a disfrutar de esas sensaciones que se me hicieron demasiado reales...

Título: Etapas.
Tipo: Viñeta.
Capítulo: 1
Género: Romance.

Etapas.

  Camina a su lado, voltea a verle de vez en cuando. Aún no sabe en qué momento terminaron caminando juntos, solo sabe que es feliz. Él va hablando de cosas sin sentidos que a ella le hacen reír. No hay momentos incómodos simplemente dos personas conociéndose y tonteando.

  Pasan por unos locales aún abiertos, ya un poco tarde y el sol no tarda en ocultarse. Algo llama su atención, aquella melodía la conoce. Su curiosidad es más grande, entonces ve a aquel chico de cabello castaño y ondulado, con su gran estatura y su sonrisa hermosa. Aquella guitarra sobre sus manos es la que produce aquella melodía que reconoce al instante.

  Sus ojos se encuentran, la sonrisa que le hacía latir el corazón aparece en sus labios. Ella se acerca, él deja el instrumento y corre hacia ella. Tiempo sin verse, unos meses realmente. Pero después de acostumbrarse a verse todos los días, unos meses es realmente un buen tiempo. Se abrazan. Ella se olvida de su acompañante.

  El castaño le separa y le agarra con sus grandes manos aquellas mejillas, se preocupa. Ya no están sonrojadas como tiempo atrás. Ahora es él el que tiene ese color en su cara. Con sus ojos lo dice. Ella siente que su corazón late con solo mirar en aquellos ojos. Esta más que segura lo que le susurran.
  
-Te quiero.- Unas palabras que durante un largo tiempo quiso escuchar, los recuerdos le invaden pero al final algo le hace girar.

  Ve a su acompañante a lo lejos pero a la vez tan cerca, todo cambia. Aquel chico de cabello negro y de una estatura un poco más baja que el castaño, una sonrisa un tanto tonta y una actitud diferente pero que le hacía sentir bien, es ahora el que tiene en sus ojos. Se aleja de las manos del chico alto. Y se sorprende negando aquella confesión que durante tanto tiempo estuvo esperando.

  Ahora no es el castaño el que la hace sonreír, no es el que hace que en su estómago se produzcan las maripositas. Ya no es el que permanece en su mente. Ya no es aquella persona a quien ama. Simplemente es alguien a quien quiere como un amigo, como una persona especial que le ayudó demasiado.

  Se siente mal al rechazarlo pero sabe que es lo correcto. Le da un beso en la mejilla de despedida, es hora de que vuelvan a sus caminos que el destino decidió separar. Ve en su rostro aquel dolor que le provoca su negación, pero es mejor así.

  Voltea hacia el otro chico. Le mira sorprendido. Ella solo dice unas palabras que le hacen sonreír.

-¿Vamos? –Él asiente.

  Se despide de aquel que fue su primer amor, siente que al fin ha podido cerrar aquella etapa que durante años le estuvo haciendo daño pero a la vez le trajo felicidad. Una forma extraña de cerrar pero que era necesario. No voltea a verle porque sabe que no lo soportará.
Unos ruidos en el cielo le distraen. Fuegos artificiales surcan el cielo. Una forma extraña de empezar la noche. Él camina hacia delante embobado con aquellas luces, ella sonríe ante su actitud infantil. Se acerca y hace algo que durante un tiempo quiso hacer. Entrelaza su mano con la de él. Voltea y corresponde a su sonrisa.

  
  Un pequeño gesto que le hace saber que es él al que ahora mira con aquel extraño sentimiento en sus pupilas, que es aquella persona especial en su corazón. Una forma nada común de cerrar y de iniciar una etapa de su vida. Pero que ahora le hace sonreír de nueva cuenta.
Credt. de la foto Dracielle <3
Es un amor de persona (: ¡Gracias *-*!